Acabo de terminar la lectura del libro El Método Ikigai de los españoles Héctor Rodriguez y Francesc Miralles. Este es un libro que me hubiese encantado haber leído años atrás ya que resume de una manera súper entretenida y didáctica, las mejores prácticas para alcanzar un propósito de vida según la cultura japonesa.
Las 35 estaciones
Para alcanzar el Ikigai o el propósito de vida, los autores recomiendan comenzar con alguno de los siguientes pasos, cada uno vinculado a algún aspecto de la cultura y tradición japonesa
Si aspiras a mejorar el 10%, plantéate qué necesitas hacer para mejorar un 100% (gambarimasu)
Incluye en tu agenda cotidiana al menos un imposible (efecto shinkansen o tren bala)
Práctica la paciencia y la perseverancia en lo que te has puesto.
Dedica 21 días a implantar un nuevo hábito positivo.
Pide feedback a personas de tu confianza sobre lo que estás haciendo.
Busca un mentor que pueda guiarte en tu pasión.
Imita y mejora lo que te gusta para tu propio proyecto.
Identifica lo que no te gusta para descubrir, por eliminación, lo que te gusta.
Desarrolla cada semana una virtud que quieres potenciar.
Comparte tu pasión con personas afines para aprender y mejorar juntos.
Sal de tu zona de confort y explora nuevos territorios.
Prioriza lo importante por delante de lo urgente.
Aparta lo que no es ni esencial ni rentable en tu vida.
Bautiza tu proyecto con un nombre que te mueva a la acción.
Recupera los valores y sueños de tu infancia.
Evoca los “grandes éxitos” de tu vida para motivarte.
Reconoce a tus amigos de primer nivel y dedícales la atención que merecen.
Une los puntos de tu pasado para entender tu presente.
Establece un horario libre de pantallas y de vida virtual.
Lleva la “slow life” a tus comidas y tiempo de ocio.
Haz una sola cosa a la vez, sin dispersarte.
Escribe algo personal al menos 5 minutos cada día.
Iníciate en el arte del haiku para conocer tus emociones.
Toma las decisiones cruciales que necesitas en este momento de tu existencia.
'Consulta con la almohada', las preguntas para las que aún no tienes respuesta.
Fluye dibujando el círculo ENSO.
Resuelve un koan cada semana.
Ejercítate en la atención plena en tus actividades cotidianas.
Déjate llevar por las serendipias y otras casualidades de la vida.
Realiza un acto de bondad gratuita cada día.
Abraza a menudo a tus seres queridos.
Viaja sin destino de vez en cuando y déjate sorprender.